En este blog hemos ido haciendo presentes las cartas que Josemari escribía a «Familiares, Amigas y Amigos» desde enero de 2013. En este post incluimos la colección de cartas que él escribía mensualmente a su familia y amistades desde que el año 2002 se incorporara a la Fundación Viatoriana del Perú (tengo que admitir que nos faltan las diez primeras, que no las hemos podido conseguir todavía).
En ellas podemos conocer el recorrido de su vida durante estos años, sus sentimientos, el amor a su Congregación y a la Comunidad Viatoriana, su profunda fe, su cercanía y amor (y esta vez palpable) a las personas que durante ese período fue conociendo.
En una de sus cartas habla de su miedo a ir al Perú, a sentirse herido por ‘las penas y las pobrezas’; pero ya decía San Agustín: «Si no quieres sufrir, no ames; pero si no amas, ¿para qué quieres vivir? Josemari sufrió en el Perú, sufrió con las y los que sufren; sufrió y amó, y vivió.
Un recuerdo especial a todas las personas de Yungay, Tamshiyacu, Cutervo y Basauri que conservan su imagen en el corazón.