POR SIEMPRE YO CANTARÉ
…tu gloria, Señor!
He vivido seis días en Valladolid. Lectura y paz, en la Residencia. Y el libro abierto de unas vidas entregadas. Lo primero que brota es el agradecimiento por la historia viatoriana de cada uno. Dos de ellos, Fermín (94 años) y Jaime, son de los primeros hermanos que conocí al ingresar en el Colegio San José de Basauri, en 1947. Otro nonagenario, Emilio, fue mi director en mi primer año de profesor…
Es fácil y consoladora la oración de pasar la lista de todos ellos y dar gracias a Dios por lo que ha vivido cada uno de los hermanos. Y se aprecian los diversos caminos por los que Dios nos va llevando. Se admiran las cualidades personales de cada uno y la riqueza del carisma viatoriano. Yo notaba la ausencia reciente de Juan Antonio, compañero y amigo que se nos fue al cielo. Vivo días de consuelo y emoción vocacional.
La mayoría de los que me leéis sabéis que el 15 de agosto, fiesta de la Asunción de María, es fecha importante para los viatores de la Provincia de España. Día de consagraciones y promesas. Me entristezco con el parón de vocaciones de viatores religiosos. Más de 20 años sin profesiones de primeros votos. ¿Mal de muchos? No me consuela.
Sí tenemos el regalo de vocaciones de viatores asociados. Cuatro catequistas de Vitoria-Gasteiz, con la madurez de la cincuentena, se comprometían “para siempre”. Cada una de ellas expuso lo que les empujaba a dar este paso. Todas subrayaban la columna de la vida de comunidad como el mayor apoyo en su maduración y decisión. ¡Bienvenidas! Ongi etorri! ¡Montse, Mari José, Elena y Ana Rosa!
También dimos gracias a Dios por los 50 Años de vida religiosa de Carlos Orduna. En Costa de Marfil, además de las Bodas de Oro, agradecían los 39 años de esforzada entrega. Carlos creyó en que los africanos también podían ser Clérigos de San Viator. Hoy, entre religiosos y asociados, son más de 70 las sonrisas marfileñas de nuestra Congregación. La hermosa familia que hoy le rodeaba nos trajo el recuerdo de sus papás, los dos maestros de escuela. También fue muy simpática la presencia de los 13 ex novicios o ex religiosos que estuvieron emocionados en la cita.
Sin levantar ni el dedo ni la voz, sí levantando muy alto el corazón, tres viatores celebrábamos los ¡60 Años! de vida religiosa: Víctor, Txomin y Josemari. En Chile, se nos juntaba Esteban. Juan Antonio no esperó tres semanas y lo celebra, en vida eterna, con el P. Fundador. Profesamos el 15 de agosto de 1955 en la capilla de Eskoriatza. Eskerrik asko, Jauna! Han sido muchos y muy variados nuestros puestos de misión. Lo que dijimos al final de la fórmula: “que Dios y mis hermanos vengan en mi ayuda”, lo hemos vivido y sentido. ¡Gracias, hermanos y Diosito!
Gero arte, Juanan
Bai, Juanan, sí, hasta luego. Recuerdo la lápida del cementerio de Eskoriazta, a la salida. “Gero arte eta otoitz bat”. “Hasta luego y una oración”. Después de una estancia prolongada de más de 30 años en tu Gasteiz querido, te retiraste a la Residencia de Valladolid. No sé si llevaste contigo tu bicicleta, acostumbrada a los bidegorris de Vitoria. Resistías y te apagabas. Tu porte externo no se doblegaba.
¿Recuerdas nuestro primer encuentro? Fue el 7 de septiembre de 1950. En el dormitorio corrido San José de Eskoriatza. Los barrotes traseros de tu cama chocaban con los delanteros de la mía. Eras más alto que yo, más espigado, con lentes gordos. También me ganabas en seriedad, silencioso.
Por delegación, te pedí quizás el sacrificio más grande de tu vida: Que fueras el director del Colegio Nuestra Señora del Pilar de Elgóibar. Era en un bar de Atotxa, Madrid, 1973, tú tenías 37 años. La cerveza estaba en su punto veraniego. “Que yo no soy para ese puesto, que prefiero empujar desde atrás, ser un segundo…” Y desde ese cargo seguiste fiel a tu estilo. Hacer grupo, vivir en comunidad, acercamiento a los profesores seglares, ser una familia. Lo que siempre te rondó en cabeza y corazón querías fuera realidad. No dudaste en admitir chicas en la matrícula. Era el primer colegio de la Provincia en ser mixto. El alumno era lo importante. Las notas son elemento manejable. Tienen que servir para levantar, para estimular. Es culpa del profesor si son muchos los alumnos que suspenden.
Alguna vez te llamamos “el Quijote”. ¿Por tu cuerpo alto y enhiesto? Altos eran tus pensamientos y tus aspiraciones. Idealista con corazón en esfuerzo realista. Te retratas en tus escritos pensados y retocados. Se puede descubrir tu interior entresacando los subrayados de tus lecturas. Sincero y amante de la verdad. Todo lo que expresabas venía de convicción robusta. Tenías el corazón bien enraizado, así era sólido lo que expresabas y vivías.
Gero arte ba, Juanan! ¡Amigos para siempre!
¿Somos hermanos los humanos?
Creo que vivimos un momento histórico convulsivo. Nuestro viejo mundo europeo tiene que dar una respuesta inminente. Asia empuja por el este; África insiste por el sur. El este europeo ya llegó a nuestra calles. Aquí, en Basauri, hay muchos rumanos que se están abriendo a la vida. Ahora son dos continentes buscando sobrevivir.
Quiero cantar y sentir con Ana Belén:
Sólo le pido a Dios
que el dolor (la injusticia) no me sea indiferente
que la resaca muerte no me encuentre
vacía y sola sin haber hecho lo suficiente.
Sólo le pido a Dios
que el futuro no me sea indiferente
desahuciado está el que tiene que marcharse
a vivir una cultura diferente.
A las tranquilas y soleadas playas del Mediterráneo, humanos tostándose con cremas apropiadas, llegan cuerpos morenos curtidos de sol y arrugados de hambre. Al Paso de Calais, vado hacia el Reino independiente que circula por la izquierda, se acercan miles de personas, blancas y negras, dispuestas a cruzar el túnel. Les importa llegar a la luz de enfrente; muchos llegarán con ojos de muerte.
¿Pero qué puedo hacer yo ante ese problema de magnitud continental? Estar enterado y llorar la impotencia ya es vacuna que impide brotes de indiferencia. Esta es el monstruo que pisa y mata fuerte.
Con letras altas como la Torre Eiffel tendríamos que escribir el trío IGUALDAD-LIBERTAD-FRATERNIDAD. Convertido en grito y seña incontenibles. Y un vendaval de solidaridad sería la revolución capaz de solucionar el desastre imparable que se nos acerca.
Seguimos con Laudato si’
El 70 Aniversario del lanzamiento de la bomba atómica sobre Hirosima y Nagasaki nos ha recordado los efectos de aquella barbaridad. Yo he visto hectáreas deforestadas del La Selva amazónica que semejan escenario de desastre atómico. El Papa Francisco clama por una conversión cultural que afecte a los corazones. “La apasionante y dramática historia humana, capaz de convertirse en un despliegue de liberación, crecimiento, salvación y amor, o en un camino de decadencia y de mutua destrucción” (n.79).
Hay afirmaciones en el texto que nos eleva el ser y el sentir:
– “La creación es del orden del amor”.
– “Cada creatura es objeto de la ternura del Padre”.
– “De las obras creadas se asciende hasta su misericordia amorosa”.
– “Todo está relacionado, y que el auténtico cuidado de nuestra propia vida y de nuestras relaciones con la naturaleza es inseparables de la fraternidad, la justicia y la fidelidad a los demás”.
– “El ser humano todavía es capaz de intervenir positivamente”
Se pueden unir muy práctica y lógicamente el tema anterior y este. Y una llamada muy práctica para mí y para todos mis amigos sería una llamada a la sobriedad-solidaridad. Aprovecho un párrafo de la encíclica, ya en los números finales, que leo así: “La sobriedad que se vive con libertad y conciencia es liberadora. No es menos vida, no es una baja intensidad sino todo lo contrario, En realidad, quienes disfrutan más y viven mejor cada momento son los que dejan de picotear aquí y allá, buscando siempre lo que no tienen, y experimentan lo que es valorar cada persona y cada cosa, aprenden a tomar contacto y saben gozar con lo más simple” (n. 223).
Basauri, 18 de agosto de 2015