Fue el primer disco de la Hna. Glenda que escuché, no la conocía. Disco viejo, y siempre nuevo. Me pareció precioso, y se lo pedí ‘prestado’ a un viator chileno. Tiene otros discos, pero…
Desde entonces me ha acompañado a menudo, en el coche (o carro), en los largos viajes de autobús, en las noches insomnes. ‘Tú sabes que te amo’, el que siempre espera y no pregunta, el que te acoge y abraza y te recuesta en su regazo, al que le miras y te mira y te sonríe, y te sientes amado, incluso en aquello de ti que no te gusta.